El Ministerio de Hacienda ha lanzado la Orden HAC/1177/2024, publicada el 28 de octubre de 2024, la cual establece los requisitos técnicos, funcionales y de contenido que deberán cumplir los programas de facturación utilizados por empresarios y profesionales a partir del 1 de julio de 2025.
Nuevos requisitos para los programas de facturación a partir de julio de 2025
Esta normativa tiene como objetivo principal combatir el fraude fiscal mediante la regulación de los programas de facturación, asegurando la veracidad y seguridad en los registros contables.
¿Qué implica la nueva normativa para los empresarios?
A partir de la entrada en vigor de la normativa, los empresarios y profesionales deberán emplear únicamente programas de facturación que cumplan los nuevos estándares exigidos en la Orden HAC/1177/2024. Esto incluye tanto a los productores y comercializadores de software de facturación como a sus usuarios. La normativa establece que estos sistemas deberán garantizar una serie de principios para asegurar que las transacciones contables registradas son fidedignas y accesibles en todo momento. Entre los principios que los sistemas deben cumplir se encuentran:
- Integridad e inalterabilidad de los registros: Los programas deberán asegurar que los registros de facturación no se pueden modificar sin dejar rastro, generando un “hash” o huella electrónica que garantice la integridad de cada registro.
- Conservación y accesibilidad: Los registros de facturación deben mantenerse en un formato legible y accesible para la Agencia Tributaria, ya sea desde el propio sistema o mediante exportaciones seguras que permitan su almacenamiento en dispositivos externos.
- Trazabilidad y legibilidad: La normativa requiere que cada registro de facturación esté vinculado cronológicamente al registro anterior y al siguiente. Esto implica que cada sistema debe garantizar una secuencia lógica y verificable que respalde la autenticidad de cada operación registrada.
- Uso de formatos estándares y firma electrónica: Los registros deben generarse en formato XML con codificación UTF-8 y contar con una firma electrónica conforme al estándar europeo XAdES Enveloped Signature.
Elementos obligatorios en las facturas
Uno de los elementos más destacados que introduce la normativa es la obligatoriedad de incluir un código QR en las facturas generadas. Este código permitirá a los receptores de las facturas verificar su autenticidad a través de la sede electrónica de la Agencia Tributaria, confirmando que han sido emitidas conforme a los sistemas aprobados. Además, el software de facturación deberá estar preparado para incluir una frase de verificación en las facturas que, en caso de facturas emitidas con el sistema VERI*FACTU, señalará explícitamente que es una “Factura verificable en la sede electrónica de la AEAT”.
Adaptación de los programas de facturación: ¿qué deben tener en cuenta los empresarios?
El proceso de adaptación a esta normativa puede suponer un cambio significativo para muchas empresas que aún no utilizan sistemas de facturación digital o emplean software que no cumple con estos requisitos. A partir de ahora, todos los programas deben estar certificados y cumplir con las especificaciones del Real Decreto 1007/2023. Esta orden implica que las empresas deberán:
- Actualizar o cambiar sus sistemas de facturación actuales para asegurar su cumplimiento con los nuevos requisitos, evitando sanciones.
- Verificar que sus proveedores de software cumplen con la normativa y ofrecen soporte para los nuevos requerimientos.
- Incluir formación al personal encargado de la facturación para familiarizarse con el uso de estos programas y las nuevas características.
Este cambio no solo afectará la gestión contable, sino también la operativa diaria de las empresas, por lo que es fundamental realizar una transición ordenada y planificada.
Si tienes dudas sobre los requisitos que debe cumplir tu software de facturación, contacta con nosotros. Nuestro equipo de asesores está disponible para ayudarte a cumplir con la normativa antes de la fecha límite y evitar cualquier sanción o inconveniente.