El salario medio bruto de los empleados aumentó un 1,89% respecto a 2018, frente al 4,58% de los directivos.
El poder adquisitivo de los empleados españoles ha crecido un 1,29% desde 2007, ya que desde entonces sus sueldos han aumentado un 18,69% y la inflación acumulada ha incrementado un 17,4%, mientras que el de los directivos es un 5,99% superior. Así se extrae del estudio Evolución salarial 2007-2019 que recoge datos desde julio de 2007 hasta julio de 2019.
En el caso de los mandos intermedios, éstos aumentaron sus salarios un 23,35%, lo que supone 5,95 puntos porcentuales más que la inflación acumulada, mientras que los directivos españoles vieron crecer su salario un 23,39% en los últimos 12 años, lo que se traduce en 5,99 puntos porcentuales más que la inflación.
Respecto al año anterior, los empleados aumentaron su salario en un 1,89%, frente al 3,43% de los mandos intermedios y el 4,58% de los directivos, respectivamente, algo que significa que la brecha salarial entre trabajadores más y menos cualificados se continúa perpetuando.