La superficie de regadío en España se incrementó un 2,1% en 2017, hasta los 3,7 millones de hectáreas un 22% de la superficie total de tierras de cultivo de 17 millones de hectáreas, según los datos de la encuesta realizada por el Ministerio de Agricultura.
En un momento de grave sequía y embalses en bajos niveles, destaca la progresiva reducción de las superficies regadas por gravedad o inundación de la tierra, que usan mayor cantidad de agua y que se sitúan en 926.748 hectáreas frente a 1.115.00 de hace una década. Mientras, crece el uso del riego por goteo o localizado, que pasa en el mismo periodo de 1,5 millones de hectáreas a 1,9, el 51,37% del total de los campos regados.