El objetivo es impulsar contrataciones estables y apoyar a colectivos vulnerables.
A partir del 1 de septiembre, un nuevo conjunto de normativas laborales entra en acción, según el Real Decreto-ley 1/2023 aprobado el 10 de enero. Estas reformas presentan un innovador sistema de incentivos que favorece los contratos de trabajo permanentes y enfatiza la inclusión de grupos vulnerables, mediante bonificaciones en las cotizaciones sociales.
El Ministerio de Trabajo tiene como meta impulsar empleos de calidad, estabilidad y fomentar la integración laboral de sectores prioritarios. Ahora, se prioriza a mujeres, individuos mayores de 45 años (anteriormente se priorizaba a partir de los 50 años) y jóvenes de menos de 30 años. Además, hay beneficios al contratar a personas con certificado de exclusión social, mujeres que han sufrido violencia de género, víctimas de terrorismo y personas con discapacidad intelectual.
En cuanto a las bonificaciones:
- Contratar a jóvenes menores de 30 años resultará en una bonificación de 275 euros mensuales o 3.300 euros anuales.
- Individuos mayores de 45 años o desempleados de larga duración tendrán una bonificación de 128 euros al mes o 1.536 euros anuales.
- Las mujeres desempleadas de larga duración recibirán 128 euros mensuales o 1.536 euros anuales en bonificación.
- Hombres desempleados de larga duración y menores de 45 años disfrutarán de una bonificación de 110 euros al mes o 1.320 euros anuales.
Con estas medidas, las empresas tienen la oportunidad de obtener un ahorro significativo al optar por realizar contratos de trabajo a estos colectivos específicos.