El 16% del total de trabajadores en España, hasta los tres millones, busca otro empleo para “mejorar su situación o compatibilizarlo con su trabajo actual”, según el análisis Randstad Workmonitor sobre búsqueda activa de empleo, correspondiente al cuarto trimestre de 2016.
Esta cifra representa “la tasa más elevada de los últimos tres años“, y que en el año 2014 se situó entre el 10% y el 12% y, en 2015 alcanzó el 14% del total.
Para el director de relaciones institucionales de esta compañia, “la coyuntura económica y la reactivación del mercado laboral” han impulsado a los profesionales a buscar otros puestos de trabajo.
España es el país europeo que registra la tasa más elevada de ocupados que buscan empleo activamente, con un 9% por encima de Europa.
En este sentido, España, Grecia e Italia han alcanzado una tasa superior a la media europea, mientras que Portugal se encuentra en el 8%, un punto por debajo.
Bélgica (6%), Austria (6%), Noruega (7%), Francia (7%) y Alemania (7%) han registrado las tasas más bajas de búsqueda activa de empleo.
Fuera de Europa, China es “el único país que supera a España”, con un 19%, por delante de Estados Unidos, con un 15%, mientras que Australia y Japón se sitúan por debajo de la media, con un 8% y un 4%, respectivamente.
En cuanto a la formación académica de los profesionales, los ocupados con educación superior “son los que presentan mayor predisposición a la movilidad” ya que, según el informe, más de 1,2 millones de trabajadores con formación superior “están dispuestos a un cambio laboral” (16%).
Los trabajadores con un nivel educativo medio se sitúan en un 14%.
Sin embargo, en el último año, los profesionales con menor nivel educativo han aumentado esta tasa en un 4%, con un comportamiento opuesto al de los profesionales con educación universitaria, que han reducido en un 1% su búsqueda de empleo activa.
