Hacienda revisará y multará a todos aquellos que realicen esta práctica.
Pagar una parte de la compraventa de una vivienda en ‘negro’ para reducir la base imponible y evitar los impuestos es una práctica común en España, donde la economía sumergida supone una parte importante del PIB.
Se trata de escriturar una casa con un valor inferior al real, una práctica común pero peligrosa, ya que la evasión de impuestos está duramente castigada por la ley y las autoridades fiscales cada vez son más duras en sus inspecciones y controles. Hacienda puede iniciar una comprobación del valor y acabar cobrando el ITP real, los intereses de demora o incluso poner multas.
¿Qué riesgos corre el comprador?
Mediante esta práctica, el comprador de la vivienda se puede ahorrar entre el 6% y el 11% del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales dependiendo de la Comunidad Autónoma en la que se encuentre.
En el caso de que las autoridades fiscales descubran el engaño, el comprador podría acabar enfrentándose al pago de intereses de demora e incluso multas monetarias por evasión fiscal.
¿Qué riesgos corre el vendedor?
Para el vendedor de la vivienda, el fraude es más beneficioso porque se ahorra más impuestos y tiene menos riesgos. En este sentido, el vendedor reduce el pago del IRPF, ya que el valor de transmisión es menor.
Además, si el inmueble se vende por menos dinero del que fue comprado, puede alegar pérdidas en la compraventa, lo que le exime de pagar la plusvalía municipal.
Ojo porque el riesgo está en que si Hacienda “no se cree” el valor del piso por ser inferior al precio de mercado puede iniciar una comprobación de valores y exigir el IRPF de la mayor ganancia patrimonial obtenida.