Inestabilidad geopolítica y costes elevados: Las amenazas para las empresas europeas
En un contexto de inestabilidad geopolítica y elevados costes industriales, las empresas europeas enfrentan un panorama desafiante. El aumento de los impagos y la no renovación de negocios son factores que preocupan cada vez más a los expertos, ya que las cifras recientes de Eurostat confirman un incremento significativo en las declaraciones de quiebra en la Unión Europea (UE). En comparación con el trimestre anterior, el número de quiebras empresariales en la UE aumentó un 3,1%, marcando tres trimestres consecutivos de máximos pospandémicos.
Inestabilidad geopolítica y costes elevados: Las amenazas para las empresas europeas
Los efectos de la inestabilidad global se sienten con fuerza en el Viejo Continente. Las quiebras han repuntado especialmente en cuatro sectores clave: la construcción (3,8%), las actividades financieras (2,6%), el comercio (2,4%) y la industria (1,6%). Esta tendencia refleja un entorno económico que continúa siendo incierto y desafiante para muchas empresas.
Los expertos coinciden en que las compañías que no han logrado adaptarse a las nuevas realidades globales corren un riesgo significativamente mayor de enfrentar problemas financieros graves, incluidos impagos y quiebras. Las tensiones geopolíticas, junto con los elevados costes de producción y la volatilidad en los mercados internacionales, han exacerbado la situación para muchas empresas que operan en sectores vulnerables.
¿Qué pueden hacer las empresas para mitigar el riesgo de quiebra?
Ante este escenario, es crucial que las empresas tomen medidas proactivas para protegerse de la creciente ola de quiebras. Algunas estrategias que pueden considerar incluyen:
- Revisión de costes operativos: Identificar y reducir costes innecesarios puede ayudar a mantener la estabilidad financiera en tiempos de incertidumbre.
- Diversificación de proveedores y mercados: Ampliar la base de proveedores y explorar nuevos mercados pueden reducir la dependencia de un único mercado o proveedor, minimizando los riesgos asociados.
- Adopción de nuevas tecnologías: Invertir en digitalización y tecnología puede mejorar la eficiencia operativa y abrir nuevas oportunidades de negocio.
- Planificación financiera eficiente: Contar con una sólida estrategia financiera y planes de contingencia puede ser la clave para sobrevivir durante periodos económicos difíciles.
- Adaptación a nuevas normativas y realidades geopolíticas: Mantenerse al día con los cambios regulatorios y adaptarse rápidamente a las nuevas circunstancias puede ayudar a las empresas a mantenerse competitivas.